Mi reflexión de hoy
"No hay manera de salir digna de entrenamiento de natación". De entrada no tiene nada de sexy el traje, la gorra, los goggles, las paletas, me da igual, etc. Corte a... tu entrenador te grita: ¡Vas mal! vas mal! como si pudieras oír, vas concentrado en bajar la cabeza, subir el codo y rezar de que no te de muerte de cuna (Que se te olvida respirar).
Hasta que te avienta el pull o de plano una tabla y ¡trasss! ¿qué paso? uno tratando de sobrevivir y te dicen ¡Otros 400 metros!. ¿Te cae? Hasta que pones ojitos de gato de shrek y dices "con aletas".
Al final del bullying en la clase con Alex (mi profesor) Cin y Omar mis compañeros y de pronto sale de la alberca Damian (a quién bautice como Tarzan, un buzo argentino muy guapo) que parece que en cuanto sale, el tiempo se detiene, todo es en cámara lenta, se quita la gorra, mueve la cabeza y parece que se escucha a lo lejos al intro de una canción de Barry White. (Suspiros) Y en el fondo lo maldices.
Uno sale y trae marcada una raya en la frente de la gorra, se marcan los goggles y el snorkel, te trompiqueas con todo y te escapas de matar con la chancla, encima seguro traes el rímel corrido de que no funciona el contra agua o no te dio tiempo de despintarte bien.
Sales y 2 niñas te dicen "Quiero ser como tú de grande" ¿Por? ¿Como nado? "No, porque todos te saludan" 2nda Reflexión "nunca seré deportista de alto rendimiento pero al menos tengo 2 fans". En fin... hoy ya llegue a nadar 2,000 mts y ¡vamos por más!
